atención al paciente crónico

La atención al enfermo crónico en una residencia es uno de los pilares del cuidado a nuestros ancianos y precisa que su personal esté formado en su atención.

Cabe destacar que más del 63 % de la mortalidad se debe a enfermedades crónicas, sin contar el elevado porcentaje de limitaciones y malestar, físico y cognitivo que producen. Estos datos, facilitados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), nos dan una idea de cómo de importantes son las enfermedades crónicas.

Saber qué entendemos por enfermedad crónica, por enfermo crónico, sus cuidados, atenciones y características son los objetivos de este artículo.

¿Qué significa el término enfermo crónico?

Una enfermedad crónica se caracteriza por ser una enfermedad de largo recorrido y de progresión lenta. No tiene por qué ser mortal y su pronóstico de curación es a largo plazo.

Si bien es verdad que pueden ser limitantes y producir un gran hartazgo por parte de la persona que la padece, hay tratamientos que las pueden aliviar.

Estos tratamientos tanto se basan en medicamentos como en terapias, como la fisioterapia, el ejercicio físico, la terapia ocupacional, la psicología… En resumen, la enfermedad crónica precisa de un abordaje multidisciplinar.

Entendemos pues, que un enfermo crónico es una persona que padece de una enfermedad crónica, que su curación va ser a largo tiempo y que precisa de una atención multidisciplinar.

En personas ancianas, se puede dar que padezcan más de una enfermedad crónica, con lo que su atención precisa de más vigilancia.

A continuación, un pequeño listado de posibles enfermedades crónicas en ancianos:

  • Diabetes
  • Hipertensión
  • Osteoporosis
  • Alzheimer
  • Asma
  • Hipertensión pulmonar

El enfermo crónico asintomático

Cuando nos referimos a un enfermo crónico asintomático, mencionamos a una persona que padece una enfermedad crónica que en su etapa inicial no presenta síntomas, entendiendo síntoma como el signo de alarma de cualquier enfermedad, por el cual a veces nos permite dar un diagnóstico.

Con enfermedades crónicas como la hipertensión o la osteoporosis, que son silentes, es decir, no dan síntomas hasta que ya no están establecidas del todo, hay que vigilar mucho.

La prevención es básica para combatir gran parte de las enfermedades crónicas, y el triángulo formado por ejercicio físico, dieta equilibrada y vida activa suele ser el más acertado para ello.

El enfermo crónico complejo

Definimos al enfermo crónico complejo como aquella persona que padece más de una enfermedad crónica, asociada también a alguna enfermedad aguda y una situación global de fragilidad.

Este tipo de enfermo precisa de una atención más profesional si cabe, teniendo en cuenta la buena coordinación de los diferentes especialistas.

Suelen ser personas con un número alto de toma de medicamentos, sensibilizadas, con una vida funcional y social limitada, lo que conlleva a que su cuidador principal, en la mayor parte de casos su familiar más cercano, precise de ayuda.

Como veremos más adelante, en estos casos además de cuidar al enfermo crónico es imprescindible cuidar al cuidador, el pilar de las atenciones a la persona enferma. Aun así, veamos cuáles han de ser las atenciones al enfermo crónico.

La atención a las necesidades específicas del enfermo crónico

Según El Periódico de la Farmacia, publicación líder en el sector farmacéutico, el 72 % de la población mayor de 65 años sufre alguna enfermedad crónica.

Además, y este dato también es muy importante, el promedio de enfermedades crónicas que sufre cada persona es de 4 al mismo tiempo.

Por tanto, el abordaje de las necesidades específicas del enfermo crónico se hace imprescindible, y más en un entorno como el de una residencia de ancianos.

Como resumen podemos decir que el abordaje de este tipo de paciente se basa en dos columnas claramente complementarias: la medicación y la adecuación del estilo de vida.

La medicación: alerta a consumir más de 7 medicamentos

Referente a la medicación, tal y como comentábamos anteriormente, el enfermo crónico anciano suele consumir una alta cantidad de fármacos.

Aunque cada uno sea el idóneo para cada enfermedad crónica, es básica la buena coordinación para evitar los efectos adversos de la polimedicación.

Se considera a una persona polimedicada a aquella que toma más de 7 fármacos, con lo que puede suponer un riesgo elevado de padecer efectos adversos por la combinación de medicamentos y sus principios básicos.

El control y seguimiento por parte del médico de familia de toda la situación del anciano es de vital importancia para controlar tanto los beneficios como los efectos adversos de la medicación.

El estilo de vida saludable, básico para el enfermo crónico

Anteriormente ya hemos comentado cómo de importante es para cualquiera de nosotros llevar un estilo de vida saludable. En las personas afectadas aún más.

No es fácil cambiar de estilo de vida, y más a una cierta edad. ¡Y lo queremos dejar claro, se puede! ¡Más aún, se debe!

En los enfermos crónicos es del todo necesario, por el bien común, que la persona se haga con las riendas de su vida cuando hablamos de salud.

A cualquier edad es posible un cambio de estilo de vida. Se puede tardar más o menos, pero se consigue.

La base de un buen estilo de vida es mantener una vida activa, realizar ejercicio físico de forma regular, un sueño reparadoruna buena dieta, equilibrada y justa.

Apoyo psicológico al enfermo y su familia

Padecer más de una enfermedad crónica conlleva no solo un desgaste físico, sino también psicológico. Y sobre todo a la persona que cuida al enfermo crónico, el cuidador principal.

Dar la confianza a la persona enferma que puede controlar los síntomas de la enfermedad se hace crucial para llevar adelante una vida plena. Dar ánimos y acompañamiento es vital.

Referente al cuidador principal de un enfermo crónico, es imprescindible seguir estas pequeñas indicaciones:

  • Seguir un plan de cuidados y actividades. El control de tiempo da mucha seguridad.
  • Realizar ejercicio físico mínimo tres veces por semana, aunque sea media hora. Los beneficios psicológicos son muy importantes.
  • Descansar. Dormir es una de las mejores ayudas para tener cuerpo y mente en un buen estado.

En MGS Seniors estamos preparados al máximo para cuidar al enfermo crónico y toda su complejidad. No dudes en contactar con nosotros si crees que podemos ayudarte.